La violencia no da respiro a Acapulco. Una de las zonas turísticas más famosas del país, perteneciente al estado de Guerrero (en la costa del Pacífico) ha sufrido este jueves un nuevo golpe cuando hombres armados atentaron contra locales de mercados ubicados en distintos punto de esta ciudad.
Alrededor de la 01:00 horas, los delincuentes ingresaron a la central de abastos, rociaron todo con combustible y prendieron fuego a puestos donde se vende pescado, frutas y ropa.
En el mercado de artesanías El Parazal, otro comando ingresó y quemó varios locales, además de una estética localizada en la calle Velázquez de León, a pocos metros del Zócalo. También, otros negocios en el mercado de Caleta fueron prendidos con fuego.
En la zona suburbana de Acapulco, un automóvil Volkswagen tipo Beetle fue reportado como perdida total al ser incendiado con bombas molotov. En esa misma demarcación, un hombre murió y otro resultó lesionado en un ataque directo.
Los hechos, que dejaron al menos seis locales y un vehículo incendiados, agravan el repunte de violencia que vive ese puerto mexicano.
Según informes, al menos 16 células criminales han sumido a Acapulco en una ola de violencia. Un reporte interno de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) municipal indica que la ciudad es disputada por células de sicarios que son escisiones del Cártel Independiente de Acapulco (CIDA), brazo armado de lo que alguna vez fue la organización de los Beltrán Leyva dirigida por Édgar Valdez Villarreal, la Barbie.
El informe detalla que el CIDA es actualmente el cártel más fuerte en el puerto turístico, pues controla la distribución de droga y el cobro de cuotas a negocios de todos los giros comerciales.
Opera en la Costera Miguel Alemán, el centro de la ciudad, y más de 80 colonias del área poniente, además del penal de Las Cruces.
Los Virus, el segundo grupo más importante, controla parte de la Zona Diamante y Puerto Marqués y una parte de la Costera Miguel Alemán, según el reporte.
Las otras 14 células criminales, denominadas en el informe como “pandillas atomizadas”, actúan por propia cuenta en colonias suburbanas y comunidades rurales.
Éstas organizaciones realizan el cobro de cuotas semanales al transporte público y cuando algún grupo delictivo sufre la detención de uno de sus integrantes por parte de las autoridades, obligan a los conductores a realizar bloqueos.
Empresarios y transportistas aseguran que la batalla a muerte entre estos grupos criminales ha acentuado el cobro de piso, los secuestros y homicidios.
Las autoridades de Bacalar han detectado un nuevo modus operandi de extorsión que está afectando…
En una intensa reflexión sobre la política y su papel en la vida pública, Ricardo…
Cerca de las 20 horas del miércoles, arribó al aeropuerto de Cancún el avión que…
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que este domingo se llevará a cabo…
A partir de enero de 2025, Quintana Roo implementará una serie de nuevos derechos aplicables…
Ejidatarios de Calderitas bloquearon esta mañana el único acceso al basurero municipal de Chetumal, en…