En los últimos dos años, Quintana Roo ha registrado solo nueve patentes, lo que lo coloca significativamente rezagado en comparación con otras entidades del país, donde se presentan en promedio 18 patentes. Esta brecha evidencia un preocupante desafío en materia de innovación en el Caribe Mexicano en relación con el resto de México.
Según la información proporcionada por el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual, los registros de patentes en Quintana Roo se han centrado principalmente en el diseño industrial, como la imagen y colores del envasado de bebidas y productos locales.
Estos números contrastan con estados como Baja California, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México y Guanajuato, que han reportado cifras mucho más altas en registro de patentes.
Existen tres razones principales que explican esta situación, según Wilberth Quezada Camarena, consultor y abogado especializado en propiedad intelectual. En primer lugar, la falta de un entorno propicio para la generación de ideas, ya que la mayoría de las carreras universitarias en Quintana Roo están orientadas hacia el sector servicios o las ciencias sociales, que rara vez conducen a la generación de patentes.
En segundo lugar, la falta de una base industrial sólida inhibe la creación de nuevas ideas. Sin una demanda clara para la innovación tecnológica, la necesidad de crear nuevas tecnologías no surge de manera natural.
Finalmente, muchos creadores optan por publicar artículos a nivel nacional en lugar de patentar sus invenciones, lo que les otorga un reconocimiento dentro del Sistema Nacional de Investigadores pero limita la posibilidad de proteger legalmente sus innovaciones.
De las 137 patentes registradas en Quintana Roo en la última década, solo 14 están relacionadas con la innovación tecnológica, mientras que la mayoría se enfoca en simples diseños de envasado de productos. Este panorama subraya la urgencia de promover un entorno más propicio para la innovación y el desarrollo tecnológico en la región.
Vía: SIPSE NOTICIAS