Problema vigente en FCP: Matrimonios con menores de edad
La práctica de matrimonios entre personas mayores de edad y menores continúa siendo una realidad en Quintana Roo, especialmente en la Zona Maya, donde la Oficialía del Registro Civil 01 de Felipe Carrillo Puerto ha registrado más de 30 intenciones de contraer nupcias hasta la fecha.
Se trata de casos que involucran a menores de entre 15 y 17 años, según las autoridades locales.
Verónica Paloma Yam, jefa del área municipal, reconoció que, a pesar de que estos matrimonios son considerados un delito según el Código Penal Federal, por motivos culturales, en la zona maya persiste la búsqueda de oficializar estas uniones a través del matrimonio.
“El matrimonio infantil es una realidad y nosotros como municipios, no estamos lejos de esto y precisamente se trata cuando una o un menor de 18 años de edad, contrae unión con una persona adulta, hemos tenido la intención de más de 30 parejas, quienes llegan para hacer los trámites”, expresó Paloma Yam.
Entre los casos observados, se destacan hombres de edades comprendidas entre los 30 y 50 años que mantienen relaciones con adolescentes de 15 a 17 años, quienes cuentan con el consentimiento de sus padres.
Según la funcionaria, esta situación surge debido a la falta de solvencia económica de los padres para mantener a sus hijos, así como a la percepción de los menores sobre el amor, o la creencia de los padres en la conveniencia de estas uniones, como era común en sus tiempos.
El matrimonio infantil, señaló Paloma Yam, es resultado de una arraigada desigualdad de género que afecta desproporcionadamente a las niñas, privándolas de su infancia y poniendo en peligro su vida y salud, además de exponerlas a un mayor riesgo de sufrir violencia doméstica.
El artículo 209-Quáter del Código Penal Federal establece las penalidades para el delito de cohabitación forzada de personas menores de dieciocho años de edad, con penas que van desde ocho a quince años de prisión y multas de mil a dos mil quinientos días.
El desafío persiste en la erradicación de esta práctica arraigada en la cultura local, mientras las autoridades y la sociedad enfrentan el reto de concienciar sobre las implicaciones legales y los riesgos asociados con los matrimonios con menores de edad.
Vía: SIPSE NOTICIAS