En Cancún, la discriminación laboral hacia la comunidad de la diversidad sexual sigue siendo una realidad preocupante, con pocas empresas ofreciendo apoyo a sus trabajadores de este sector. Según Linger Méndez, activista por los derechos de la diversidad sexual, las personas transexuales son las más afectadas por esta situación.
Méndez subrayó que la comunidad trans enfrenta grandes obstáculos en el mercado laboral, ya que a menudo se les niega la oportunidad de avanzar en sus carreras, incluso cuando tienen formación en áreas como leyes, medicina, enseñanza o diseño. Esta exclusión no solo limita su desarrollo profesional, sino que también les dificulta costear los tratamientos necesarios para su transición, lo que impacta negativamente en su salud mental.
“Aún hay mucho trabajo por hacer. La letra ‘T’ en nuestra comunidad ha sido la más golpeada, violentada y excluida, incluso dentro de la misma comunidad LGBTQ+. En el ámbito laboral, las personas trans están extremadamente limitadas”, comentó Méndez.
La activista también destacó que aunque algunas empresas están comenzando a aceptar a la comunidad trans, el progreso es lento. Evaluó el nivel de apertura y desarrollo laboral hacia esta comunidad en un 3 sobre 10. Además, señaló que es crucial no solo aceptar a las personas trans en el lugar de trabajo, sino también protegerlas de posibles actos de violencia o discriminación por parte de sus compañeros.
Para abordar esta problemática, varios colectivos han comenzado a realizar encuestas para evaluar la situación de las personas trans en sus empleos y ofrecer charlas de sensibilización a las empresas. El objetivo es reducir la discriminación laboral y garantizar que las personas trans puedan desarrollarse plenamente en el ámbito laboral.
“Es un proceso en el que aún estamos trabajando. La discriminación laboral no ha sido erradicada y sigue siendo un obstáculo significativo para nuestra comunidad”, concluyó Méndez.
Vía: SIPSE NOTICIAS.