Las acciones de Grupo Elektra, una de las principales empresas de servicios financieros y comercio especializado en Latinoamérica, sufrieron un desplome histórico del 64.76% durante la jornada de este lunes, situándose en 332.09 pesos por título en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), según reportó La Jornada.
Este desplome se produjo tras la decisión de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), que ordenó reanudar la cotización de las acciones bajo el esquema de negociación continua. La empresa del empresario Ricardo Salinas Pliego advirtió que esta medida ha provocado movimientos “anormales” en el precio y volumen de sus acciones, calificando el impacto como un “daño irreparable”.
En un comunicado dirigido al público inversionista, Elektra destacó los riesgos asociados con realizar operaciones con sus acciones en estas condiciones. “Cualquier transacción podría implicar responsabilidad para las partes involucradas”, señaló la compañía.
Una salida inminente de la BMV
El desplome ocurre en un contexto complicado para Elektra. La semana pasada, la empresa anunció su intención de abandonar la Bolsa Mexicana de Valores tras 30 años de cotización, argumentando que el mercado no refleja el verdadero valor de sus acciones ni genera beneficios para sus accionistas.
Ante esta situación, Elektra ha convocado a una asamblea de accionistas el próximo 27 de diciembre de 2024 para discutir la privatización de la compañía. Este proceso implicaría una oferta pública de adquisición para retirar la totalidad de sus acciones en circulación.
Conflicto con la CNBV
La relación entre Elektra y la CNBV se ha tensado debido a las decisiones regulatorias sobre la suspensión y posterior reanudación de la cotización de sus acciones. Este conflicto añade incertidumbre al futuro de la empresa en los mercados financieros.
La decisión final sobre la privatización marcará un punto de inflexión en la trayectoria de Grupo Elektra y en la visión estratégica de sus operaciones tanto en México como en otros mercados clave.