La Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA) de Quintana Roo, bajo la dirección del nuevo titular Óscar Rébora, ha anunciado que dará prioridad a la recuperación de playas afectadas por la erosión, así como al manejo del sargazo, ambos considerados problemas ambientales urgentes. La actualización de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), vigente desde 2009, es un paso crucial en estos esfuerzos.
Actualización de la Manifestación de Impacto Ambiental
Rébora explicó que la MIA actual, aprobada en 2009 y renovada en 2019 por otros diez años, es considerada obsoleta. El fideicomiso relacionado con esta MIA ha sido solicitado para su extinción por el banco encargado, con planes para crear uno nuevo. La MIA debe actualizarse para reflejar las condiciones actuales y permitir una mejor gestión de las playas erosionadas.
“Estamos trabajando para actualizar la MIA, ya que el documento vigente no cubre adecuadamente la extensión actual de las zonas afectadas por la erosión”, señaló Rébora. La MIA actual solo incluye a Benito Juárez, Solidaridad y Cozumel, pero no a Puerto Morelos, que en el momento de la aprobación era parte de Benito Juárez. La revisión incluirá la posible ampliación del polígono para cubrir adecuadamente todas las áreas afectadas.
Enfoque Integral y Colaboración
El nuevo titular de SEMA destacó que la estrategia para enfrentar la erosión de playas y el problema del sargazo implicará una colaboración estrecha con la iniciativa privada, científicos, universidades y expertos en el tema. La revisión de la MIA también buscará extender el polígono de playas erosionadas para ajustarse a la realidad actual y mejorar las medidas de protección y recuperación.
“Estamos evaluando el polígono actual y trabajando con varios actores para asegurarnos de que la información y las medidas que tomemos sean adecuadas para enfrentar los desafíos actuales”, agregó Rébora.
Desafíos y Planes Futuros
La erosión de playas no solo representa un problema ambiental, sino que también afecta directamente la economía del estado al impactar el turismo y otras actividades costeras. El enfoque de la SEMA incluirá medidas para mitigar estos efectos y proteger las áreas costeras vulnerables.
“Es fundamental que adaptemos nuestras políticas y medidas de protección a las condiciones actuales y futuras”, concluyó Rébora. La actualización de la MIA es solo el primer paso en una serie de acciones planificadas para abordar la erosión de playas y otros desafíos ambientales en la región.
Próximos Pasos
SEMA continuará con la revisión de la MIA y colaborará con diversos sectores para implementar las estrategias necesarias para la recuperación de playas y la gestión del sargazo. Se espera que los resultados de esta actualización mejoren la capacidad del estado para enfrentar estos desafíos ambientales de manera efectiva.