Un ataque con una bomba teledirigida rusa impactó un edificio residencial y un parque infantil en la ciudad de Járkov, causando la muerte de cinco personas e hiriendo a al menos 47, según informaron las autoridades locales.
El alcalde de Járkov, Ihor Terekhov, informó a través de Telegram que un niño perdió la vida en el parque infantil, mientras que tres personas murieron en un bloque de apartamentos de 12 plantas, el cual se incendió tras el ataque. El gobernador regional, Oleh Syniehubov, añadió que una veintena de los heridos se encuentran en estado grave.
El ataque dejó uno de los extremos del edificio envuelto en humo negro, con los pisos superiores en llamas, y varios automóviles estacionados en el exterior fueron destruidos por el fuego. Equipos de emergencia y voluntarios se apresuraron a rescatar a los sobrevivientes, mientras el cuerpo de una víctima yacía bajo una alfombra en el suelo, rodeado de policías.
Los residentes, atónitos y algunos cubiertos de sangre, permanecieron en el exterior del edificio mientras los médicos atendían sus heridas. Aunque las autoridades no especificaron cómo murió la quinta persona, se sabe que los ataques afectaron a cuatro zonas distintas de la ciudad.
Járkov ha sido objetivo frecuente de bombardeos rusos desde el inicio de la guerra, aunque en las últimas semanas la intensidad había disminuido, posiblemente debido a una incursión de las fuerzas ucranianas en la región rusa de Kursk.
Las autoridades ucranianas señalaron que el ataque del viernes fue ejecutado con cinco bombas aéreas guiadas lanzadas desde aviones en la región rusa de Belgorod. Estas bombas, equipadas con sistemas de navegación de alta precisión, son difíciles de interceptar y han causado una devastación significativa en la guerra en el este de Ucrania en los últimos meses.
Vía: LA JORNADA.
