La imponente mansión del ex gobernador de Quintana Roo, Félix Arturo González Canto, es una verdadera obra de lujo y ostentación. Ubicada en el exclusivo fraccionamiento Andara de Chetumal, la residencia se extiende sobre un área de 5 hectáreas, superando incluso la grandeza de la casa del también ex gobernador, Alejandro Moreno.
La enorme propiedad cuenta con detalles glamorosos y refinados. Destacan los acabados en mármol, las pinturas de reconocidos artistas, y los lujosos muebles que suman un valor adicional de 20 millones de pesos.
Además, posee una piscina semiolímpica con una cubierta automatizada y un área aclimatada especialmente diseñada para las mascotas caninas del ex mandatario. Según investigaciones, Félix González Canto habría utilizado a familiares y testaferros para construir residencias similares en otras ciudades, como Cozumel, Monterrey, Mérida, Ciudad de México y Miami, e incluso en los Emiratos Árabes Unidos.
Esto sugiere una red de propiedades que evidenciaría el uso indebido de recursos públicos durante su gestión.
Recientemente, el ex gobernador entregó más de 10 millones de pesos para recuperar algunas de estas propiedades que le habían sido aseguradas durante el gobierno de Carlos Joaquín González.
Esta acción refleja los esfuerzos por mantener el control sobre su vasto patrimonio, que parece estar envuelto en oscuros y complejos entramados financieros.
El testimonio de Zambada ha encendido las alarmas en el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sobre los pagos realizados a funcionarios durante la administración del ex gobernador Félix González Canto.
Las revelaciones apuntan a que el ex mandatario realizó cuantiosas inversiones en ciudades estadounidenses como Miami, lo que ha generado gran preocupación e interés por parte de las autoridades financieras norteamericanas.
Estos hallazgos han puesto en evidencia los posibles vínculos entre funcionarios públicos y actividades económicas sospechosas, despertando un intenso escrutinio sobre las acciones del ex gobierno y sus implicaciones en suelo estadounidense.