
Hoy 15 de enero, Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, volverá a comparecer ante el tribunal federal del Distrito Este de Nueva York. En esta audiencia, se discutirá un posible conflicto de interés, ya que su abogado, Frank Pérez, también representa a su hijo, Vicente Zambada Niebla, alias “El Vicentillo”.
En la audiencia programada, se podrían establecer nuevas fechas para el juicio o incluso un cambio en la declaración inicial de Zambada, quien en septiembre pasado se declaró no culpable de los 17 cargos que enfrenta, incluyendo tráfico de drogas y homicidio.
Por otro lado, las negociaciones legales de Joaquín y Ovidio Guzmán López, conocidos como “Los Chapitos” e hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, continúan. Se espera que las conversaciones con Ovidio Guzmán concluyan antes del 27 de febrero, mientras que con Joaquín Guzmán se prevé llegar a un acuerdo antes del 19 de marzo. La intención es alcanzar un acuerdo de culpabilidad para evitar un juicio, lo que reflejaría un cambio estratégico por parte del Cártel ante las presiones del sistema judicial estadounidense.
Estas acciones legales coinciden con un período de tensión interna en el Cártel de Sinaloa, donde facciones lideradas por “El Mayo” Zambada y “Los Chapitos” disputan el control de la organización. Este conflicto ha intensificado la violencia en regiones como Culiacán, Sinaloa, donde los enfrentamientos por el poder han sido recurrentes.
La situación también se desarrolla en un contexto de cambios políticos en Estados Unidos, tras la reciente asunción de Donald Trump como presidente, quien ha prometido una postura más firme contra el crimen organizado. Estas declaraciones han incrementado la presión sobre los líderes del Cártel para adaptarse a las nuevas dinámicas legales y políticas en la región.